jueves, agosto 04, 2005

I see dead people

Mientras invocaba al espíritu de la viuda Mujica para que me diera la exclusiva de quien cresta le había incendiado su mansión de Matta Oriente #301, en mi redacción comenzaron a ocurrir extraños sucesos paranormales. De pronto, apareció una sombra que patudamente se sentó en mi escritorio, y con voz dulce y profunda me susurró al oido:

-en este mundo no cabemos tu y yo

En sus ojos, un par de luciérnagas me decian que, efectivamente, no pertenecía al mundo de los vivos, y las posibilidades eran solo dos: A.- Había encontrado una puerta a otra dimensión B.- Mi tabla Ouija necesitaba un afinamiento y me había equivocado de fantasma.

-si no te largas luego... yo te haré la guerra- volvío a decir la sombra sin labios.


-Alvaro? eres tú?
-el mismo
-y qué haces en mi oficina!
-no, qué haces tú en el infierno
-estoy en el infierno?
-en realidad no, estamos haciendo la fila para participar en Rojo Vip.
-y pueden concursar los fantasmas?
-creo que esa es la idea.








El fantasma comenzó a moverse de manera extraña. "Estoy en un escenario???", preguntó. "no, Alvaro, estás en un armario", le dije para tranquilizarlo.

-me siento algo extraño
-como un ermitaño?
-el asunto, es que no soy muy feliz, como ves
-bueno, yo tampoco, y eso que estoy viva.
-es que éste es el mundo de los locos rayados
-claro, eso debe ser.